domingo, 12 de diciembre de 2010

Juanito


¡Fue Luna a esa joven y le clavó un espejo! Huyó luego Luna, y huyó hasta el Paraguay. Pero la Ley la ajustició y fue condenada. En su celda acabó el diario, y ese diario hurtó el oficial. Y el oficial lo muestra a su gente, y yo soy el oficial. Leeré ahora el diario de Luna; concédanme atención y buen oído, porque las cosas aquí dichas son de amor y locura, y todos deseamos esas cosas. El diario de Luna:

“Paraguay. 15 de agosto. La vida es algo extraño, Juanito, ahora me doy cuenta. Pude salir del país sin problemas, pero no sé, me siento mal. Me dijeron ya del orfanato; no hice todo quizás para encontrarte. No, no lo hice. Fui a buscar a esa tipa, y la quise matar; no era yo, Juanito, me desesperé. Cuando la vi me llené de bronca y solo pensé matarla. Mi dolor más grande es saber que te usaron, qué aberraciones habrán hecho con vos. Y no sé nada de vos; no sé cómo estás, qué te pasó, si me seguís queriendo….
17 de agosto. ¡Por Dios, me están buscando! Saben que estoy acá.
22 de agosto. Juanito, me encerraron. Esta es la justicia: la policía ni se mosqueó en atrapar a esa perra y encontrarte; pero ahora, porque yo la ataqué, y ni siquiera murió, ahora me encierran. ¡Y hasta en Paraguay me buscaron! Espero salir pronto, que se entienda mi causa. No aguanto un día más sin vos, Juanito; sos lo único que tengo y que amo.
23 de agosto. Sos lo único que tengo, es la verdad. ¡Qué me importan mis amigos, mi trabajo, mis historias! Pensaba escribir una novela sobre nosotros, sobre nuestro amor. Cuando me casé con tu papá pensaba en dos cosas: formar una familia y estar cerca de vos. Sí, yo lo quise a tu padre, y él me amaba mucho, lo sé, pero el corazón tiene sus razones. El corazón…. Mi corazón…. Es tuyo, desde el primer día. Soy sincera, Juanito, y vos sabés que siempre lo soy. Su muerte fue algo terrible; el accidente y todo. Fue terrible el dolor, el mío y el tuyo. Pero así fue; y estuve yo para cuidarte. Y lo nuestro fue maravilloso.
27 de agosto. Hace varios días que no escribo mi diario. No sé qué va a pasar, estoy sin condena. ¡Sueño con la boda! ¡Con nuestra boda! Sé qué pronto serás mayor y, Dios quiera, pronto también voy a estar fuera, y en Argentina. Pero tengo mis dudas, mis miedos. Sueño que estemos juntos, siempre, pero no sé…. No sé qué sentís vos; ¿aún me querés? Tal vez te cansaste de esta vieja, no sé, y voy a entenderlo aunque me duela. ¡Pero sos mi Juanito, y de eso nunca me olvido!, y te tenga lejos o cerca, seas mío o de cualquiera….
28 de agosto. Esperame. No te olvides de mí. Juanito esperame.”
  

1 comentario:

Opine sobre nuestros productos

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...